Unidos a los Mualhid

Capitulo 2 - Examen medico

Cerro los ojos. Lo que paso, aun cuando no lo recuerda, le resulto bastante taxativo al cuerpo. Su mente le decía que debía estar pendiente pero cuerpo no quería responder. Cerro sus ojos. No supo cuanto estuvo con los ojos cerrados. Nunca escucho cuando la puerta se abrió. Solo cuando una mano le toco el brazo fue que se percato que ya no se encontraba solo. De un brinco abrió los ojos. Frente a el se encontraba un caballero de unos 5' 9", su tez era blanca con calidad de marfil. El pelo negro largo hasta los hombros. Sus ojos verdes un pocos adormilados, su nariz estilizada y bastante larga, y sus labios rosados y finos. ¿quien sera?, pensó.

- “Lo lamento ” Al ver la expresión de desconcierto continua diciendo “No trate de hablar, .. ¿Jeff?” A lo cual busca confirmación en el rostro. Ante lo orden de no hablar solo mueve la cabeza en afirmativo por que el otro continua diciendo: - “Soy el Doctor Elmer White, estaré a cargo de tu tratamiento. Siento que tenga dolor porque el efecto del analgésico y el sedante ya ha cesado. Pero necesito revisarle consiente. Pero lo solucionamos tan pronto termine de examinarle. Veamos ...”
Este comentario lo tomo con mucha sorpresa al esclavo. Un doctor le pide disculpas. Para colmo algo le esta ofreciendo medicamentos para el dolor. Pero cuan mala es la condición para que le ofrezca algún tipo de calmante. Dios Jalal, debe ser que el dolor me tiene aturdido. Eso debe ser, escucho mal. El doctor le esta exigiendo que se disculpe, posiblemente por no recibirle adecuadamente, pero ¿como puedo arrodillarme si estoy atado? Por eso no quiere que le hable y me queje. Me esta avisando que no me va a dar nada para el dolor. El esclavo toma una bocanada de aire de la mascara, claro que escucho mal, pensó Jeff, lo que dijo el medico es que no quiere que hable y no quiere que se queje de dolor.

El que a todas luces es doctor, baja su cabeza y busca en un maletín negro. Comenzó sacando una pequeña linterna con la que verifica la dilatación de las pupilas. Luego le levanto un poco la cabeza y le quito la mascarilla se oxigeno. Jeff se sintió aliviado de no tener algo tapandole la boca. El medico le indico: “necesito que cuando te lo indique abra su boca para poder examinar su garganta.” Jeff rápidamente abre su boca cuando el doctor se acerca, pero al sentir que le introduce una paleta no puede evitar respingar. Al ver la reacción el doctor le enseña la paleta de madera y le explica que le va ‘comprimirle’ aplastarle un poco la lengua porque necesitaba verificar la garganta. Al ver el rostro de Jeff, rápidamente le explico que no dolía. Sin darle mucho tiempo para pensar le dice:

“ Aaah” mientras le dice: “ Un poco lastimada pero un poco de descanso y cuidado y estará como nueva, por ahora trate de hablar lo menos posible.”

Saca el estetoscopio y lo frota antes de comenzar a auscultarle con el estetoscopio el corazón y continua con el pecho.

El doctor dice: “ No creo que piense que va a ningún lado, así que le voy a liberale la mano izquierda ¿me dará problemas?”

Recordando que no debía hablar, Jeff solo hace un gesto negativo con énfasis algo desesperado.

-“Claro que no, usted no piensa dar ningún problema.” Esto lo dice riendo y con tono de broma y procede a abrir la abrazadera. Con cuidado lo ayuda a incorporar mientras con el estetoscopio verifica los pulmones, ayudandolo a recostar nuevamente. Le toma la mano y con el esfigmomanómetro le verifica la presión sanguínea. Luego con sus manos examina presionando y golpeando suavemente en diferente áreas del abdomen.

El doctor : “Lleva mucho tiempo inconsciente por lo que tuvimos que ponerle un catéter. (Dandose cuenta por la expresión de sus ojos que no le entendía, le dice de forma menos formal) “Tuvimos que introducirte un tubo para que pudieras orinar, voy a revisarte, para ver si todo esta bien.”

Tan pronto el medico quito la sabana, el esclavo aprovecho para revisar si tenia todas sus extremidades y/o tenia algún tipo de marca de sutura. No viendo nada malo en su cuerpo pudo tomar de nuevo la respiración que no se había dado cuenta que había aguantado al instante que el medico levanto la sabana que le cubría. Estaba vivo y completo, lo demás lo enfrentaría en su correspondiente momento. El medico confirma su pensamiento diciendo “ Todo se ve bien.”

Respetando lo que el entendía que era la orden del medico de no hablar bajo su cabeza lo mas posible como muestra de agradecimiento. El doctor le sonríe, esto hace que el esclavo se relaje un poco. Jeff reconociendo su posición de esclavo, le ofrece la mano que fue liberada para completar el examen, al medico para que pueda volverla aherrojar a la cama. El doctor no entendió el gesto. El esclavo viendo que no había sido entendido y con temor de recibir un castigo major mas tarde, tomo la abrazadera de cuero y se la presento al doctor.

El doctor sonrió y le dijo, “creo que no sera necesario, creo que estos también sobran, porque no quitamos las de los pies.” Quitando las de los pies. “Te pondré mas medicamentos para el dolor, lo cuales dan un poco de sueño.” “Daré instrucciones para que te traigan un caldo ahora y otro dentro de cuatro horas.” El doctor procedió a explicar: “Debemos asegurarnos de estabilizarte antes que pueda quitarte la sonda para orinar o comer alimentos sólidos.”

Jeff asintió con la cabeza. Al no poder contestar verbalmente le hace que su mente divague y a su vez analice la situación. No hay dudas que este doctor solo atiende a personas libres. Trata con mas respeto y cortesía de la necesaria. Sus esclavos deben ser muy afortunados. Jeff no duda que el doctor debe tener esclavos ya que se muestra muy cómodo con el.

En eso oye el ruido en la puerta. Automáticamente levanta la vista. Ve como se acerca un hombre alto de mas de 6 pies y espalda ancha. Su tez blanca pero de mejillas rosadas, su pelo con rizos suaves rubio cenizo (ese color dorado obscuro que hace que el color cambie dependiendo de la cantidad de luz de la habitación). Sus facciones angulares hacen destacar su masculinidad. Contrastando con sus ojos azules, sus labios de anchura normal y sonrisa perfecta las cuales las suavizan sus facciones.

Dirigiendose al doctor pregunta el recién llegado: “Elmer, ¿como se encuentra mi nueva adquisición?”

Jeff, rápidamente comprende las implicaciones de esa pregunta. Siente su espalda congelarse y no sabe como reaccionar. Sabe que lo que corresponde es hacer una genuflexión, pero el tirón de su muñeca le recuerda que estar atado a la cama. Rápidamente dobla todo su torso, casi haciendo que su cabeza toque sus rodillas. Acaba de entrar su nuevo dueño.

Mientras tanto Elmer White, el doctor que lo ha estado atendiendo contesta mientras se levanta de donde estaba sentado: “ Se esta recuperando muy bien. Estábamos dialogando que podrá levantarse de la cama y comer como corresponde pronto.”

Como una danza orquestada con presión el lugar que ocupaba el medico es ahora ocupado por su amo. Este le toca en el hombro para indicarle que se levante y le dice: “¿Como te encuentras Jeff? Luego de la pregunta le sigue un silencio y se le queda mirando. Esto le indica a Jeff que espera una contestación.

Biieen ... ¿Commo pueddo servirle? ... ¿Señor ... Amo? Dice Jeff entrecortadamente y con esfuerzo.

El dueño y amo de los esclavos del centro es el gobierno. Hasta ahora había pertenecido a una institución, no una persona. Por tanto, a todos los que no son esclavos sus instrucciones es referirse a ellos por señor o señora según el sexo y por el titulo u oficio si lo conoce. Pero por la forma en que pregunto sobre su adquisición, significa posesión; significa que yo soy su esclavo.

A los que el hombre alto y rubio responde: “No creo que te encuentres bien. Y sobre como servirme ... me puedes ayudar cooperando y siguiendo las instrucciones del medico para que te recuperes lo mas pronto posible. ... O sea, tus ordenes son hacer todo lo necesario para que ayude a tu pronta recuperación.” El hombre alto frente a el hace un momento de silencio. Al ver que el esclavo no reacciona o responde. “¿Comprendes cuales son tus ordenes?”

Jeff no entiende la pregunta, no sabe lo que quiere que el responda, pero esta seguro que este hombre quiere que le conteste. El se siente cansado y adolorido, pero no tiene idea de como va a cumplir esa orden sin sentido. Un esclavo nunca debe negarse a una orden de su superior a menos que la misma ponga en peligro la vida del que la da o de una persona libre. Así que tímidamente y carraspeando por el dolor que le produce hablar responde: “Si, señor - amo”

Sonriendo el hombre alto continua diciendo: “Dejame presentarme yo soy quien te adquirió y mi nombre es Edgar Oldtree. Se que son muchas las cosas que te han sucedido últimamente, muchas cosas que has pasado y son muchas las cosas que van a cambiar. Pero una cosa te quiero dejar clara mi interés es que recobres la salud. Si necesitas o quieres algo no dudes es pedirmelo. Poco a poco nos iremos conociendo. Luego que te recuperes empezaremos con el entrenamiento.”

Al ver que el amo Edgar se ha quedado fijo mirandolo, comprende que esta esperando algo. Jeff sin pensarlo reacciona diciendo: “Gracias señor Amo”

En eso entra un esclavo todo vestido de negro con una bandeja. El esclavo bajo su cabeza y simplemente miro al Amo Oldtree y luego al Doctor White. Sin mediar palabra el esclavo desplego una mesa portátil frente al amo Oltree y procedió a pararse frente al marco de la puerta. El esclavo procedió a bajar su cabeza frente al doctor White y se dirigió a la puerta. Al oler el caldo mi estomago reacciono con una sensación de vacío y hambre. Aun cuando el hambre me motivaba a tomar el tazón de caldo que me había sido ofrecido previamente. Resultaría muy rudo e inapropiado de mi parte si no tengo previamente el permiso para tomarlo. En el centro de esclavos eso no hubiese sido problema ya que la comida que se te servia de seguro era para ti y los administradores no se preocupaban por modales o etiqueta. Ser esclavo del gobierno tiene la ventaja que solamente las infracciones que están enumeradas en el código del esclavo son sancionadas. Solamente después de reunirte con tu supervisor y haber sido amonestado en mas de una ocasión es que seras castigado para infracciones menos severas. Y tomar los alimentos sin permiso se considera como infracción menor. Resuelto con el pedir disculpa. Ante una infracción menor quizás lo mandaría a labores adiciones como limpiar los baños o los pisos. Pero eso no aplica al pasar a ser esclavo personal.

Todavía no estaba completamente seguro si fue asignado y adquirido como un esclavo personal. Eso seria maravilloso ya que entonces no perdería su vida próximamente. Fue sentenciado a muerte. Para infracciones moderadas a severas castiga al esclavo con la asignación de poner a la venta al esclavo. Pero la sentencia de muerte no se cambia, no existe perdón para un esclavo, solo castigo. Usualmente los sentenciados a muertes, libres o esclavos, son ejecutados en la camara de gas. El procedimiento de eutanasia para los enfermemos, incapacitados o edad era para darle una muerte digna a los esclavos. La eutanasia se practicaba mediante una inyección que les induce al sueño mortal. Por su expediente intachable como esclavo la Mujita o juez le sentencio a inyección mortal y no a la camara de gases. El pánico le recorrió por todo su cuerpo y por primera vez lucho para liberarse de las ataduras y los guardias cuando vio que no era llevado a la sala de tratamientos sino a la camara de gas. Grito, lloro y suplico para que se le aplicara lo que le ofreció la Mujita y no la camara de gas. Pero quien va ha escuchar a un esclavo. Simplemente estaba condenado a muerte. ¿Que diferencia hay en como se ejecute la sentencia a un esclavo? Pero tan pronto fue atado a la silla y comenzó a sentir los efectos del gas, comprendió porque la Mujita lo miro compasiva y le dijo que lamentaba no temer mas remedio que ordenar su ejecución, pero que al menos ordenaría la eutanasia porque era una forma mas humana de morir. Es desesperante saber que con cada bocanada de aire que tomes tu vida se desvanece.

Jeff pensó que el hombre que tenia al frente puede quitarme la vida solamente porque tiene deseos de ver sangre. Por la estatura y anchura del amo OldTree no necesitaba sino sus propias manos. No hay limite de lo que puede hacer un amo privado. Si el amo Edgar Oldtree entiende que es una afrenta el que yo coma frente a el, el puede castigarme como quiera y en donde quiera. Los esclavos exclusivos no son raros, pero si costosos. Normalmente se le da el poder de castigar como guste al amo ya que los que son vendidos tiene la etiqueta o sello de problemáticos y que necesitan constante supervisión. En el centro se oyen muchas historias sobre ser esclavo personal. Es un castigo aplicado a los esclavos por considerarse incorregible, pero sus faltas son moderadas. El gobierno sale de un esclavo problemático y el nuevo dueño obtiene un objeto valioso, si logra romperlo lo suficiente para que haga lo que se le ordene. Algunos dueños utilizan medicamentos, otros fuerza, dolor y juegos mentales. Que tipo de sistema utilizara este amo, Jeff no lo sabe, pero de seguro en el ‘entrenamiento lo sabrá’. Hasta que ese momento no llegue no vale la pena preocuparse. No hay preocupación que evite lo que seguro sucederá. Mejor andar por el lado seguro. Si he sido adquirido como esclavo privado no hay protección del gobierno. Al ser esclavo privado mi amo se convierte en dueño absoluto de mi cuerpo y mi única ley.

El amo Edgar Oldtree se incorporo y busco almohadas de las otras literas. Con suavidad me ayudo a sentarme en la cama, acomodando las almohadas en mi espalda para que me sirvieran de soporte. No comprendo porque el amo no dejo que el esclavo se hiciera cargo de mi cuidado. Tampoco entiendo porque el sirviente lo deja hacerlo cuando el amo no lo ha pedido expresamente. Ante el permiso implícito, al acercarle el tazón a sus labios, Jeff comenzó a tomo tomar el caldo. Al tragar vio que tenia dificultad. No tan solo tenia la boca completamente seca, sino sus garganta se sentía severamente lastimada. Aun con la ansiedad que le provocaba el hambre, tuvo que tragar lentamente y tomar aire entre los sorbos. Calculo que el tazón de cerámica contenía aproximadamente no más de dos tazas y media de caldo de pollo el cual estaba tibio. Dio gracias en su mente de que no hubiese estado muy caliente ya que su garganta no lo hubiese tolerado. Para su propia sorpresa se lleno con 2/3 partes de lo que se le ofreció, pero no sabiendo si le cumplirían con la promesa de más, termino el contenido del envase de cerámica. Fue recompensado con una sonrisa de Amo Edgar. El amo Edgar Oldtree descanso el tazón en la mesa portátil y procedió a sujetarlo con una mano mientras con la otra retiraba las almohadas extras y las tiraba a la otra cama. Al mirar noto que el doctor se encontraba en la misma y le tiro la almohada. El doctor Elmer White con un pequeño movimiento evadió que ellas le diera, mientras miraba con una expresión divertida al amo Edgar Oldtree.

El amo Edgar le dijo que le dejaba para que durmiera. Mientras con su mano le guiaba cuidadosamente para acostarle en la cama. Jeff pensó que hay demasiadas cosas para saber como para que su mente descansara. Su cuerpo estaba adolorido pero ya había dormido lo suficiente. ¿El amo le sujetaría nuevamente?

Su pensamiento fue interrumpido por el amo Edgar Oldtree diciendo: “¿Elmer ... Ya le inyectaste para el dolor?”

“No, estaba esperando ver como toleraba la comida” fue la contestación del medico y sin mas precedió a medir la dosis y luego de pasarle un algodón humedecido con algo le puso el medicamento por vena.

Edgar mientras tanto pregunto: “Debe continuar usando la mascarilla de oxigeno?”

A eso contesto con un escueto “Si” posicionando la mascarilla que hasta ese momento había estado a un lado de la cara en el rostro de Jeff. El doctor continua diciendo mirando a Jeff: “Jeff, se que no te gusta la mascara de oxigeno pero debes mantenerla todo el tiempo posible en los que tus pulmones se fortalecen nuevamente. Debes hablar lo menos posible, tu garganta esta lastimada y solo curara si no te esfuerzas en hablar.”

Asiendo una pausa continua diciendo, White: “ El que duermas ayudara a tu cuerpo a que este pueda recuperarse mas rápidamente. A tu lado mano izquierda hay una jarra de agua puedes tomar toda la que gustes. No te preocupes por el baño, este tubo y bolsa se encargara de eso ”

El doctor continua diciendo: “ Para evitar tentaciones que la curiosidad puede dar, voy a dejar la atadura de tu mano derecha pero para que estes mas cómodo voy a recomendarle a Edgar que no amarre el restante de las abrazaderas.”
Mirando al Amo Edgar mas que preguntandole, le dice: “ ¿De acuerdo?”

El rostro de Edgar muestra claramente que iba va a protestar. El tono de Elmer claramente le indica que a todas luces debe decir que si como si hubiese dicho ‘mas te vale, decir si’ Por lo cual con un encoger de hombros Edgar Oldtree indica que esta de acuerdo.

Elmer hace el que no se da cuenta y continua diciendo dirigiendose directamente a Jeff: “ Dentro de cuatro horas te va a despertar mi esclavo Aiden, para que limpie la bolsa de drenaje, recibas una terapia respiratoria, un baño, comas y te inyecte nuevamente.” Mira al esclavo que se encuentra en la puerta confirmando que ha sido escuchado. Le responde el esclavo con una inclinación en la cabeza.

El doctor White continua diciendole a Jeff: “Quiero que entiendas que no quiero que le des ningún problema a Aiden, es cierto que es un esclavo pero también es enfermero y sabe que tiene hacer, el tiene sus ordenes y tu tienes las tuyas. ¿Alguna duda sobre lo que he dicho?”

Jeff solamente responde: “Si, Señor” El sonido mitigado por la mascara que le cubre la boca y nariz. Encoge sus hombros, esperando un golpe, o una amenaza, al ver como acaba de romper la orden de no hablar. El doctor le toca cariñosamente el hombro en reafirmación silente que todo esta bien.

Ya en un tono de broma y completamente relajado le dice a Jeff: “Si le das problemas estarás recibiendo una edema diaria por un mes. Pero, eso no sera necesario, porque eres de buen corazón y sabes seguir instrucciones. Así que basta de parloteo y acuestate a dormir.”

Terminada las advertencias el doctor White abandona la habitación seguido por su esclavo Aiden. Oldtree se acerca nuevamente y suavemente le toca la parte de la mejilla derecha que ha quedado descubierta por la mascara. Le dice: “Que bueno es tenerte aquí.”

Al enderezar su cuerpo, Edgar Oldtree se queda mirando a vacío, a la ventana, a la litera de arriba. A todo y nada en particular; dice en un tono seco fuerte y de completa autoridad: “Vigilalo y avisame de cualquier cambio. Cuidado con mostrarte o asustarle.

Jeff rápidamente piensa. ¿Con quien esta hablando el amo? Acaso esta hablando conmigo, entonces, ¿a quien debo vigilar y no asustar?

Su amo Edgar Oldtree se le queda mirando. Como si hubiese leído el pensamiento le dice en el mismo todo autoritario: “Jeff la orden de vigilar y no asustar no es contigo. Tu orden es acostarte y dormir. (Bajando su voz) le dice todo esta bien, no estoy molesto contigo, ( y le vuelve a repetir) todo esta bien.”

Jeff cerro sus ojos y no tuvo problemas a obedecer la orden de dormir ya que el medicamento ya estaba causandole el efecto que el medico esperaba.